13 Port Ángeles
Jennifer
Solo pasaron unos minutos después de que partiéramos para
que empezara a llover. Mientras veía por la ventanilla una palabra se repetía
en mi mente una y otra vez.
-
Vampiro… Vampiro… Vampiro…. –
Mientras veía por la ventana del vehículo pensé que eso
explicaría algunas de las cosas. Pero no se suponía que los Vampiros eran
criaturas de la noche. Quien había oído de Vampiros estudiando en la secundaria
vistiendo ropa de diseñador y usando autos último modelo. Bueno… si se ha oído aunque
el único vampiro estudiando en secundaria según yo se era Stephan Salvatore. Y aunque
era una historia de ficción, en esta vida había muchas cosas raras y yo lo
sabia en carne propia.
Llegamos al lugar de Mike y cada quien partió para su casa,
mi padre había ido de pesca con unos compañeros del trabajo, así que solo tenía
que preparar cena para uno. Iba a terminar de cenar cuando recibí una llamada
de Jessica. No le habían prestado el auto y la ida a Port Ángeles mañana se
cancelaba. Pero minutos después, me llamo Ángela para decirme que había logrado
que su madre le prestara el auto si la acompañaba a un recital, así que era mi
deber comunicárselo a las demás chicas.
Lo único que quería en estos momentos era acostarme y
dormir. Y una ducha caliente siempre me ayudaba, pero en mis carreras no había
llevado una toalla al baño, bueno estaba sola así que no importaba realmente. Salí
hacia mi dormitorio sin toalla y cuando abrí la puerta una ráfaga de viento
frio choco contra mi piel. La imagen de las manos de Howard, acariciándome fue
lo primero que se me vino a la mente, lo vi allí junto a mí sonriendo, y luego
vi sus colmillos. Mi sueño se había ido. Me seque rápidamente me puse un
camisón y encendí mi computadora.
Y cuando llegue a mi motor de búsqueda teclee la palabra
vampiro.
Habían páginas y páginas sobre el tema, además de
sugerencias como “vampiros reales” “vampiros góticos” “libros de vampiros” “películas
de Vampiros”
Trate con “leyenda de los fríos” y aun así encontré paginas
y paginas al respecto. Tendría que confrontar a Howard al respecto.
Al fin logre dormirme pero, nada logro que la idea se
alejara de mi cabeza. El día siguiente por segunda vez me levanto un rayo de
sol.
Le avise solo a Jessica para que nos juntáramos en casa de Ángela,
-
Donde esta Lauren.- preguntaron
-
No me pude comunicar con ella. - Les
dije.
-
Tenemos que irnos ya, si queremos llegar a buena
hora. – dijo Ángela
Solo iba, por no quedarme sola el domingo, realmente nunca
me había gustado eso de ir a las tiendas y probarme de todo para terminar
comprando una o dos cosas. Si algo me gustaba iba y lo compraba, fin del
asunto. Sin embargo me pareció que una tarde con las chicas era lo que
necesitaba. Ángela era tímida pero manejaba como desquiciada, sin embargo estaba
ciento por ciento concentrada en la carretera, solo nos comento que iría con
Eric al baile de la próxima semana pero que no estaba segura de ir con él al
baile de graduación. Jessica estaba feliz de ir con Mike aunque seguía un poco
celosa de la atención que tenía conmigo, yo trate de calmar sus ansiedades
diciéndole que Mike no me importaba más que como compañeros de clase.
-
Te entiendo. – dijo Jessica - o sea tienes a Howard, pero siempre es molesto
la forma en que te ve Mike. –
Ángela no hizo
comentarios al respecto ya que al parecer aparte de mí a los únicos que les
interesaba mi relación con Howard era a Jessica y a Mike.
La elección de los
vestidos no tardo tanto como me imagine. Jessica y Ángela querían que paseáramos
por la playa mientras llegaba la hora de cenar, eso trajo nuevamente los recuerdos
de mi conversación con Rachel, había visto una librería “New Age” cuando
veníamos para acá y les dije que quería darle una ojeada, así que quedamos de
juntarnos en el restaurante.
Llegue a la librería y pregunte si tenían libros sobre
vampiros.
-
Se nos acabaron es un tema muy popular estos
días. –
-
Tiene pagina web para ver cuando le vienen, solo
vine de paseo-.
-
Si, tome mi tarjeta. –
Salí de allí y camine sin rumbo unas cuadras, la idea de que
los Cullen fueran vampiros no se iba de
mi mente, Rachel decía que habían estado Antes en Forks, eso hacia tal vez
setenta años, lo que me hacía pensar si las leyendas eran ciertas que tan viejo
seria Howard.
De pronto esa sensación familiar lleno mi ser, era una
sensación que me indicaba que había peligro cerca. Volví a ver con cuidado y no
identifique el lugar donde andaba, había estado caminando sin darme cuenda y
sin rumbo fijo mientras pensaba en Howard y me había perdido, empezaba a
atardecer y el sol estaba cerca del horizonte. Como a cinco cuadras de donde me hallaba
divise el muelle. Con seguridad si llegaba al él, podía preguntar por el restaurante o tal vez
encontrar un taxi.
Pero eso no era lo que había provocado la sensación, de
pronto vi dos hombres, que se me acercaban por detrás, pensé en correr sabía
que podía llegar a muelle antes de que ellos me alcanzaran, de pronto otros tres me cortaron el camino
por enfrente.
-
Hey que tenemos aquí. – dijo uno de los hombres
-
Parece una linda turista perdida. – dijo otro.
-
No. Yo creo que anda buscando diversión.- dijo
un tercero.
-
Chicos.
Lo siento. Pero tengo algo de prisa. –
-
Pero si acabas de llegar, y la diversión está
por comenzar. - dijo uno sacando un cuchillo.
Howard
Regresamos del viaje con Rosalie. Y yo me dirigí a la casa
de Jennifer. Estaba por llegar y vi la luz encendida de su cuarto, era raro
ella siempre dormía algo temprano. Paso
bastante rato hasta que al fin se durmió. Yo corrí hacia su habitación. Sobre
la mecedora en la que usualmente me sentaba a verla había una toalla mojada. Su
rostro no estaba tan tranquilo como otras noches y me entristecía no saber qué
era lo que la afligía y aun más no saber cómo hacer para que eso terminara.
Regrese a casa por la mañana, tenía que ir a cazar y estaría
de regreso hasta la tarde, era domingo del cualquier manera y habría sol todo
el día.
-
Ya se fueron a Port Ángeles y Jennifer no se está
probando vestidos. Yo creí que ustedes
iban a salir ese día.- dijo Alice cuando regresé.
-
Bueno Alice, déjame decirte algo, tu eres la única que compra ropa solo porque
vas a salir. El siguiente día. -
De pronto vi que Alice no me estaba poniendo atención estaba
en uno de sus trances cuando las visiones se complican. La sangre se me helo su
rostro me decía que no eran buenas noticias.
Cuando salió del trance me dijo,
-
Jennifer dejo a sus amigas entro a una librería.
–
-
Y que tiene eso de raro. –
-
Tu novia, es algo muy extraño. –
-
Hey, primero no es extraña. Y todavía no es mi
novia. –
-
Si es extraña. - dijo Emmet burlón desde la
planta de abajo.
-
No es contigo Emmet. –
-
Sabes que lo es, y no es que sea algo malo, y apúrate
con lo de ser su novio, además todo ese lloriqueo de que eres peligros y no
eres seguro para ella, empieza a ser molesto. –
-
Tengo que coincidir con Emmet. - dijo Alice –
pero al momento hay cosas que tiene más urgencia. -
-
Tu visión, -
-
Si eso, decía que Jennifer es extraña, porque
hay veces que la veo más claro que a los humanos es como si fuera una de
nosotros, otra veces es como si la viera por un cristal empañado, pero lo peor
es que siempre hay agujeros negros en las visiones, y eso ya sé que significa
problemas como lo que paso con el auto.-
-
Ok, dame los detalles.-
Tomo un lápiz y escribió la dirección y vio su reloj
-
La visión que tuve ocurrirá dentro de unas horas
según la inclinación del sol. Bella se separa de sus amigas y ahí es cuando la
visión se pone borrosa, siento que es algo más que indecisión de parte de ella,
puede ser que solo ande perdida
-
Prefiero no tomar riesgos.-
-
Llévate el Spider es más rápido.- dijo Alice.
Salí como alma que lleva el diablo, había ido cientos de
veces a Port Ángeles, sabia lo peligroso que podía ser el área de las bodegas,
era fácil perderse y había mucho delincuente por ese lugar. Si hubiera tenido
un corazón me hubiera estallado de tanta que era mi aflicción, los humanos eran así, criaturas frágiles, lo
que me hizo pensar en la futilidad de iniciar una relación con ella.
En la visión de Alice el sol ya se estaba poniendo así que
todavía tendría tiempo de llegar a la ciudad. La dirección era de la tiendas
donde se probarían los vestidos, el plan era encontrarla antes de que se separara
de sus amigas,
Cuando llegue era ya
demasiado tarde Ángela y Jessica estaban solas y caminaban hacia la playa,
revise sus mente y supe que Jennifer se dirigía una librería new age, que
quedaba cerca de donde deje el auto, fui hacia él y me dirigí a la librería, me
topé con bastante gente así que no pude correr, y cuando llegue a mi nuevo
destino la mujer que era dueña estaba cerrando la librería. Cheque en su mente
y vi la imagen de Jennifer hablando con ella. Me baje del vehículo y me dirigí
a ella.
-
Lo siento tendrá que volver mañana. – dijo
cuando vio que me le acercaba.
-
Buscaba a una clienta que tuvo, usted hace un
rato. -
-
La muchacha que buscaba libros de vampiros. –
Era tonto decirlo, pero sentí un escalofrió que recorrió mi
cuerpo cuando ella dijo eso.
-
Libros de vampiros. –
-
Si son muy populares con las adolescentes.-
-
Si, vio para donde se fue. –
-
Se fue por allí dijo señalando hacia el área de
las bodegas. –
Me subí al auto y empecé a buscarla pero era muy despacio
buscarla así por los callejones.
Jennifer
Bueno por lo menos no hay más gente cerca y no es Forks, o
después de esto si tendría que mudarme pensé.
Ellos nunca supieron que les paso, ataque primero al que tenía
el cuchillo le rompí la muñeca, la mandíbula, y lo deje inconsciente antes de
que los demás se dieran cuenta de lo que sucedía. Salte abriendo las piernas y
de sendas patadas salieron volado otros dos, cayeron al piso y el choque de sus
cabezas con el pavimento los hizo perder el conocimiento. Los últimos dos
empezaban a darse cuenta de lo que estaba ocurriendo pero no tuvieron chance de
hacer movimiento alguno cayeron inconscientes, luego de que les rompiera las
narices. Vi alrededor para ver si alguien se había dado cuenta de lo que había
pasado. No había nadie. Me arregle el cabello y la ropa y corrí al muelle.
Estaba decidiendo que ruta tomar ya sobre la calle enfrente
del muelle y Howard me alcanzo, venia en un auto diferente y venia de la dirección
en que deje a los hombres.
-
Sube al auto. –
-
Howard. –
-
Vamos Jennifer sube al auto. –
-
Está bien, no te pongas nervioso. –
-
Como te vienes a este sector sola y a pie. -
-
Me perdí. –
-
Te llevare donde tus amigas deben estar
preocupadas. -
-
Como sabes donde están ellas. –
-
Solo confía en mí. -
-
Crees que de no ser así me hubiera subido al
auto. – dije algo molesta – o sea ni siquiera sabias que iba a venir y si venia
acompañada o no, Y te apareces todo violento dándome órdenes. –
Howard agacho la cabeza y se acarició, las sienes.
-
Carlisle deberías de revisar tu cabeza haces eso
demasiado seguido. –dije en tono sarcástico burlón.
-
Solo me pasa cuando estoy contigo, -
Tuve que reírme por su cometario.
-
Bueno pues si me vas a llevar con mis amigas písale
al gas porque tengo hambre. –
-
Como diga su majestad. –
-
Me basta con que digas princesa. - Dije
haciéndole ojitos.
Cuando llegamos al restaurante ellas estaban saliendo de allí.
Howard
Cada minuto me desesperaba mas salí del auto con intenciones
de buscarla a pie. Y su olor me llego.
Fui caminando y buscando su olor hasta que me topé con unos hombres,
parece que había habido una pelea
-
Que paso aquí. – me dije a mi mismo
Saque mi celular y llame a la policía local, les indique que
había una pelea entre cinco hombres, y les di la dirección. Luego cuadras abajo
sobre la calle del muelle, vi a Jennifer caminar como si tuviera todo el tiempo
del mundo. Regrese al auto y la alcance. No podría creer que le tuve que pedir
dos veces que subiera al auto.
-
Te llevare donde tus amigas deben estar
preocupadas.
-
Como sabes donde están ellas. –
Otra vez había hablado de más. Y no estaba muy feliz con mi
tono, insinuó que era un stalker, que, bueno, no era precisamente correcto,
Vamos a quien quiero engañar. Me acaricie las sienes, aunque no era humano
Jennifer hacia surgir todas estas sensaciones. Solo la lleve donde sus amigas.
Jessica tenía una mirada conspiradora. Pero Ángela la vio sorprendida.
-
Vaya, Howard Cullen! Bien calladito te lo tenías.
– pensó Ángela.
-
Hola. Encontré a Jennifer de pura casualidad,
estaba perdida y me pidió favor que la trajera con ustedes.- les dije, y
Jennifer pareció aclararse la garganta y casi estoy seguro que dijo “mentira”
entre dientes, pero nadie reacciono a eso.
-
Lo siento ya comimos tuvimos que usar la
reservación o la hubiéramos perdido, y no hay nadie en casa.- dijo Ángela.-
-
Si no les molesta quisiera entonces invitar a Jennifer
a cenar, debe estar hambrienta.-
Ambas muchachas vieron a Jennifer.
-
No vemos
el lunes, y disculpen. – dijo Jennifer.
Ángela y Jessica entraron en el vehículo y se marcharon.
-
Espero que te guste ser el foco de atención
porque van a está hablando de nosotros todo el camino hasta Forks y mañana va a
ser peor.-
-
Eso será mañana, dijiste que estabas hambrienta. – le dije
-
Y mucho, y yo supongo que a ti no te apetecerá
nada del menú. – dijo ella con una mirada suspicaz
Y entramos al restaurante.
ver cap 14
https://howardravenclaw.blogspot.com/2023/04/reboot-de-my-twilight-capitulo-14.html
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